¿Cómo poner límites al uso de la tablet o el teléfono?
Nadie puede negar que los dispositivos móviles son una gran herramienta para las mamás y papás actuales, y no sólo porque nos permiten tiempo libre para platicar con nuestros amigos en una reunión de domingo, sino porque tienen aplicaciones y juegos que fomentan el desarrollo cognitivo de nuestros peques, siempre y cuando, se usen de forma adecuada.
En este artículo no vamos a juzgar a nadie por darle una tablet a su niño para que la deje platicar media hora más, cada mamá sabe cómo cuidar de sus hijos. Lo que sí vamos a darte son tips para que puedas aplicarlos cuando tú decidas que quieres limitar el tiempo de estos dispositivos.
Establece horarios (y respétalos)
Para que las tablets y celulares sean una herramienta educativa y de entretenimiento, necesitan estar reguladas por horarios (igual que a nosotros nos ponían horarios para ver la televisión). Dependiendo de la edad de tus hijos, establece horarios para jugar con sus tablets y apégate a ellos. Recuerda que para establecer límites hay que ser consistentes, así que elige un horario que también sea conveniente para ti y no permitas que se extienda más allá de los tradicionales “10 minutitos más”.
Explícales a tus hijos por qué hay horarios para las cosas
La comunicación siempre es clave en la relación con tus peques. Si desde chiquitos entienden que el uso de estos dispositivos tiene que estar regulado por su bien, entonces será muy fácil que aprovechen la hora que les das y no te la vuelvan a pedir, siempre y cuando seas consistente con esto.
Y si en algún momento tienes que salirte del horario por tu propio bienestar (y paz mental), explícales que es una excepción y que al día siguiente se regresa a los horarios habituales.
Enseña con el ejemplo
Los niños son esponjas y van a aprender más de lo que tú haces que de lo que les dices. Si realmente quieres un ambiente con dispositivos controlados, esto debe empezar por ti y por tu pareja. Si les estás enseñando a tus hijos que el uso de los dispositivos en la mesa no es correcto, y tú estás revisando Facebook mientras comes, estás dando un mensaje contradictorio. Tanto tú como tu pareja deben apegarse lo más posible a los mismos horarios de los niños, y cuando éstos ya estén dormidos, entonces hacer uso libre de lo que quieras.
Enséñales con el ejemplo, aunque, si es una emergencia, volvemos nuevamente al punto anterior de la comunicación. Si tienes que contestar un mensaje durante la comida o fuera del horario permitido porque es relevante para tu trabajo o porque papá te va a llamar para avisarte algo, explícale a tus hijos lo que estás haciendo. Si les dices “mamá va a contestar este correo porque de eso depende un nuevo proyecto que la va a hacer muy feliz”, tus hijos entenderán que no es algo de todos los días y sabrán que esos dispositivos también sirven para otros propósitos que ellos mismos aprovecharán cuando crezcan.
Cero Internet
Una norma básica para los niños menores de 14 años (aunque sea difícil de lograr) es que no les permitas acceso libre a Internet. En esto todas las asociaciones pediátricas del mundo se ponen de acuerdo y aseguran que los niños no deberían tener acceso ilimitado, sobre todo cuando tienen menos de 10 años. ¿Qué puedes hacer? Antes de los 6 años, siempre que les prestes la tablet o el teléfono, asegúrate de que no esté conectado a la red de WiFi, sino que los programas o aplicaciones estén previamente descargados para que puedan utilizarlos. (YouTube Kids tiene una función especial para esto, por ejemplo).
Otro tip es que si tienes niños mayores de 6 años, no tengan la clave de WiFi de tu casa. Así siempre podrás controlar cuando entren a Internet y sentarte junto a ellos a navegar, para que puedas irles explicando las cosas que van descubriendo.
Sabemos que los peques nacen con un chip digital integrado y que saben manejar el tema de la tecnología mejor que cualquiera de nosotros, pero hay muchas herramientas y aplicaciones que te ayudan a supervisar el uso de Internet.
Ahora, si estás listo para establecer límites, te dejamos lo que los expertos denominan “Dieta digital para niños”, que es la cantidad de tiempo que deberían estar expuestos a las pantallas, dependiendo de su edad.
Antes de los dos años: nada, no los expongas a tu celular ni a la tablet.
De 2 a 4 años: media hora al día.
De 5 a 10 años: Una hora al día, siempre con supervisión de los padres, y nunca en horario de comidas.
De 11 a 12 años: Una hora y media al día, siempre con atención de los papás y sin acceso libre a Internet.
De 13 a 14 años: Dos horas al día para entretenimiento, y el tiempo que necesiten para hacer sus tareas, siempre con supervisión de sus papás.
A partir de los 15 años: En la adolescencia será muy complicado que controles el tiempo que pasan tus hijos con sus celulares, pero los expertos recomiendan que no duerman con el celular cerca (de preferencia, que lo dejen fuera de la habitación cuando se metan a dormir).